martes, 23 de junio de 2015

Mascotas seguras y aseguradas

Los animales también pueden acceder a seguros médicos y de accidente, además de a la ayuda de veterinarios
Hace unas semanas comentábamos que, al igual que las personas, nuestras mascotas necesitan estar documentadas. Según las normativas municipales el animal ha de encontrarse debidamente documentado, y el propietario o tenedor ha de estar en condiciones de poner dicha documentación a disposición de la autoridad competente cuando le sea requerida.
 
Para ello, hay que inscribirlo en el Registro de Animales de Compañía antes de los 3 meses desde su nacimiento. También nos hacíamos eco de que en el caso de perros, todo propietario está obligado a contratar un seguro de responsabilidad civil, cuyo precio y plazos estarán en función si el animal está o no calificado como potencialmente peligroso.
 
Compañías como Caser, Axa, Mapfre o Rastreator tienen un apartado dedicado a las mascotas. En base a las distintas comunidades autónomas, la cobertura civil de la tenencia de nuestro perro puede estar inscrita en la póliza multi riesgo hogar de nuestra casa. Estos seguros guardan una gran similitud con los que puede contratar un ciudadano para sí mismo.

Existen pólizas de hogar que incluyen a las mascotas
 
Según la legislación municipal en el caso de poseer animales calificados como potencialmente peligrosos, el propietario debe tener una licencia administrativa que autoriza su tenencia y el documento acreditativo de su inscripción en el Registro de Animales Potencialmente Peligrosos. Si por cualquier circunstancia no puede presentar alguno de estos documentos en el momento de ser requeridos, el propietario dispondrá de un plazo de 10 días naturales para presentarla en la dependencia municipal que corresponda.

Seguridad social y visitas a domicilio

Desde el punto de vista sanitario en la actualidad muchas clínicas y hospitales veterinarios que disponen de igualas y planes de salud; así como otras variedades que brindan parecidos servicios. Podemos destacar tres modalidades: Plan de salud, igualas y seguro veterinario.
 
Así, el Plan de salud engloba un grupo de servicios en un paquete único que se establece entre el cliente y el centro veterinario, enfocado principalmente en la prevención de enfermedades y en la mejora de la calidad de vida de nuestra mascota. Por otra parte la más empleada es la conocida como Iguala que cubre la atención veterinaria para aquellas consultas como vacunas, revisiones, tratamientos preventivos, limpieza e higiene, control de peso y estado general de salud.

Existen servicios de veterinarios a domicilio
 
Esta es la fórmula más conocida y la más indicada en los tiempos que corren en los que hay que controlar hasta el último céntimo que se gasta en nuestros hogares. En el Centro Veterinario Villalba I.F. tienen para los propietarios de mascotas un servicio de Seguro Salud con dos modalidades.
 
Dependiendo de la opción elegida (la opción A sale por unos 13,27 Euros al mes, mientras que la B es de 23,57 Euros), si la cobertura se amplia los beneficios son mayores. El pago se realiza en trimestres naturales e incluso disponen de un servicio de financiación que se puede ajustar a las necesidades del dueño del animal, sin que por ello tenga este que renunciar al tratamiento más adecuado para su mascota.
 
En Andalucía más concretamente en Sevilla se encuentra «Canitas». Ellos mismos se denominan como la Seguridad Social de tu mascota. ¿Su tarifa? 15,61 Euros al mes IVA incluido. Entre sus servicios están las consultas generales, vacunas, analítica, cirugía, radiología e higiene bucal, entre otros. Otra opción es el llamado «Vitalplan» de Vetersalud se trata de unas acciones y servicios veterinarios en toda España aplicados de modo preventivo para mantener la salud de tu mascota y de tu familia.
 
También tenemos el ejemplo de «Instavets» . Se trata de servicios veterinarios a domicilio. ¿Su precio? Desde 39 euros. También tiene otros servicios adicionales como: vacunas (entre 25 y 45 Euros), análisis y biopsias (desde 25 euros), un seguro de salud por 500 euros anuales (IVA incluido) e incluso para el triste momento del adiós ofrecen bajo el epígrafe de “Despedida en casa” (99 Euros) la posibilidad de despedirte de tu fiel amigo no en una fría camilla de metal; sino en la que ha sido su casa.

Seguros de accidente y de responsabilidad

Al margen de los seguros médicos están los Seguros veterinarios. Se trata de un contrato con una compañía de seguros especializada en salud veterinaria por el cual se paga un coste mensual por un plan o una poliza a cambio de que la aseguradora se encargue de todo o parte de los gastos veterinarios en determinadas situaciones excepcionales (urgencias, accidentes, etc).
 
En la pasada edición de 100x100 Mascotas se presentó «Mascotsegur». Se trata de un seguro para mascotas (perros y gatos) que ofrece cobertura en toda España para intervenciones quirúrgicas, estancias y asistencia veterinaria. El seguro ofrece también la posibilidad de: garantizar una indemnización en caso de fallecimiento por accidente, servicio de entierro de la mascota (hasta el límite del capital asegurado vigente en el momento del fallecimiento), así como garantía de responsabilidad civil derivada de la propiedad de las mascota.
 
Dependiendo de la opción y para un perro de tamaño mediano el precio está entre los 15 y los 28 euros mensuales. ¿Cómo funciona? El propietario elige el veterinario que desea y la compañía le reembolsa los gastos. Se pueden «apuntar» perros y gatos de más de tres meses de edad o menores de nueve años en el momento de realizar la póliza.

Hay mucha variedad de seguros para mascotas
 
Por otra parte Mapfre a la hora de hacer un seguro tanto en perros como en gatos ofrece la posibilidad de dos opciones adaptadas a las necesidades: Básica (accidentes, robo, extravío, vejez, enfermedad incurable, vejez o accidente, estancia en residencia y defensa jurídica) que cuesta 80 euros anuales aproximadamente y la ampliada (todas las anteriores más opcionalmente: asistencia veterinaria por enfermedad y accidente, cobertura de responsabilidad civil (opcional) y servicio de consultorio telefónico) que está alrededor de 200 euros anuales.
 
Estos precios están en función del tamaño del animal, si es o no de raza y si es un ejemplar de los catalogados como peligrosos. También está «Segurvet» que desde 15 euros al mes o 178 euros al año (impuestos incluidos) se puede contratar un seguro para su perro o gato.
 
Para ello tienen que reunir una serie de condiciones: estar identificados con el microchip e inscritos en el registro oficial correspondiente, que tengan al día la cartilla sanitaria y el calendario de vacunas, que no desarrollen actividades deportivas o de caza y que tengan entre 3 meses y 10 años.

Por último destacamos «Kalibo», se trata de un seguro combinado para perros y cachorros y los precios oscilan entre los 53,18 euros a los 222,27 euros anuales, dependiendo de la opción por la que se decida. Hay muchas más ofertas y nuestra intención es que esta información haya servido a modo de orientación.
 

martes, 16 de junio de 2015

El lenguaje corporal de los gatos

La cola es el diccionario gatuno



Hay animales de compañía a los que sólo les hace falta hablar. Lo que muchos no saben es que nuestros fieles compañeros sí que se comunican y expresan sus estados de ánimo, pero de forma diferente. Al igual que los seres humanos, los gatos han desarrollado un lenguaje común que les permite entenderse entre ellos. Conocer lo que le pasa y saber lo qué piensa es más fácil de lo que crees.

Tener un gato es una de las opciones más elegidas cuando nos planteamos comprar o adoptar una mascota. Estos animales destacan por su belleza y su esbelta figura. Además, son bastante tranquilos por norma general y requieren unos cuidados que no nos exigirán demasiado sacrificio. Depende de si tenemos niños hay algunas razas más adecuadas para ellos. G. Bernard Shaw afirmó una vez que el hombre es civilizado en la medida en que comprende a un gato. Para entendernos con nuestro gato, es importante que conozcamos sus reglas básicas de comunicación.



Los felinos domésticos nos hablan a su manera. Por medio de los movimientos de las distintas partes de su cuerpo y a través de sonidos característicos (como maullar entrecortado), nos hacen partícipes de su alegría y felicidad, pero también de los momentos en los que tienen miedo, algo no les gusta o están enfadados por algún motivo. Conocer de antemano el significado de este conjunto de manifestaciones corporales y lingüísticas, nos ayudará a interpretar mejor sus deseos y temores, además de resultar más sencilla su educación.

Traduciendo ronroneos
Los sonidos que emite un gato han sido objeto de estudio desde la antigüedad. En Egipto no sólo eran considerados animales sagrados y tomados como auténticas divinidades, sino que además su lenguaje fue ampliamente investigado. Los informes sobre la comunicación felina fueron numerosos en el siglo pasado y hoy en día continúan las averiguaciones debido a la multitud de registros que presenta el idioma de estos adorables animales.
 


Las variables básicas que se tienen en cuenta a la hora de clasificar los sonidos que emiten son tres: la duración, la entonación y la intensidad. Además, existen circunstancias particulares ante las que los gatos pueden 'hablar' de forma típica. No es el mismo sonido el de un gato en celo, denominado maullido, que el de un gato que está siendo acariciado, llamado ronroneo.

El catálogo de maullidos es amplio y puede ir del corto y apenas inaudible, utilizado para llamar la atención sobre algo que necesita, como comida o que le abran la puerta, hasta el prolongado y algo entrecortado, específico de la época en la que está en celo. Estos maullidos son constantes durante la noche y pueden resultar incómodos para el dueño. Para evitarlo, tenemos la opción de la castración o la esterilización.



En cuanto a los ronroneos, popularmente se identifica con un sentimiento placentero por parte del gato. Estos sonidos continuos y roncos pueden darnos a entender que nuestro gato está a gusto a nuestro lado, pero también pueden darse durante un periodo de enfermedad del felino para comunicarnos su estado de dolor y de nervios.

Hablan con su cuerpo
Las emociones de los mininos se nos muestran con gran claridad por medio de la coreografía de su cuerpo. En el modo de actuar de un gato influyen principalmente sus singularidades genéticas y el modo en el que ha sido educado. No podemos esperar el mismo recibimiento de un gato que ha sido maltratado, que de otro que siempre ha estado amparado bajo el calor de una familia cariñosa.



Desde la cabeza hasta la cola, el gato es un libro abierto de gestos plenos de significado. Los gatos confiados y con liderazgo dentro de la camada suben la cabeza para mostrarse valientes, pero si un gato no tiene confianza suficiente con nosotros o es más sumiso, agachará la cabeza. Si nos ofrecen su cabeza, es para que la acariciemos y nos marquen con su olor.



Cuando un gato nos mira fijamente con sus grandes ojos es para que seamos conscientes de que nos está observando. Ante gente desconocida, un gato suele acercarse a los que permanecen indiferentes, en vez de acudir a aquellas personas que le llaman. Debemos estar atentos cuando tenga los ojos entreabiertos: la mayoría de las veces será porque tiene sueño, pero también puede estar enfermo. El gato dilata las pupilas cuando algo le asusta.

Con las orejas, un gato puede hacer muchos movimientos y las enfocará hacia los ruidos que escuche. Si las tiene hacia arriba, significará que es feliz pero si las dirige hacia delante en ángulo, es porque está molesto. Por otra parte, los bigotes también pueden darnos una pista de su estado de ánimo: estiradas y hacia delante, está contento mientras que hacia atrás, tiene miedo. La boca abierta puede ser una amenaza y un síntoma de agresividad, sobretodo si emite algún gruñido.



Sin embargo, el mejor diccionario es la cola: cuanto más baja, más triste está el minino. Si la mueve rápidamente es que está enfadado y puede mostrarse agresivo, pero un movimiento suave y pausado, es sinónimo de tranquilidad, de que quiere jugar o de que está concentrado en algo. Si la cola está rígida, tendremos que fijarnos en la punta de la misma: si está quieta, el gato quiere algo; si esta recta, está feliz, y si se mueve mucho, está irritado. Hay que tener cuidado cuando el felino arquea e infla su cola pues puede atacarnos.

  Redacción/facilisimo.com 

miércoles, 10 de junio de 2015

La desparasitación en los animales de compañía

Un aspecto vital para su salud
Los parásitos, son seres vivos que viven a costa de otro ser vivo superior (llamado por ello hospedador), habitando dentro o sobre ellos y alimentándose de partes de su organismo o de sustancias alimenticias ingeridas por éstos. A los parásitos que viven sobre el animal hospedador se les llama parásitos externos; a los que viven dentro del hospedador, se les llama parásitos internos. Los parásitos de las mascotas y humanos son potencialmente molestos y peligrosos para el animal o la persona que los alberga por varios motivos.

Por sí mismos, estos parásitos pueden ocasionar directamente lesiones sobre el organismo. Muchos son transmisores de otras enfermedades infecciosas (que albergan en su interior y que transmiten al hospedador cuando le pican o cuando penetran en él), las cuales son luego muy difíciles de identificar y pueden poner en grave riesgo la vida de las mascotas y de sus propietarios. Además, interfieren con la capacidad de inmunización de las vacunas. Es decir, una vacuna, aplicada sobre un animal previamente parasitado, es muy probable que no tenga un buen efecto sobre el animal, quedando este desprotegido frente a las enfermedades contra las que se pretendía vacunar.

Evitar cualquier riesgo

Para minimizar los riesgos que corren tanto mascotas como personas, la medida básica que se debe exigir al sector clínico veterinario y a los propietarios de mascotas (tanto perros como gatos, y también especies denominadas exóticas, como conejos, cobayas, reptiles y aves, cada vez con mayor presencia en nuestros hogares) es una correcta y adecuada desparasitación de los mismos.



Aquí se debe distinguir entre lo que es una desparasitación curativa, eliminar a los parásitos del animal una vez que éste ya los ha adquirido y que han sido detectados en una revisión rutinaria del animal, por ejemplo, durante un análisis de heces, y una desparasitación preventiva, cuyo objetivo será evitar que un animal se infeste a lo largo de su vida y/o evitar que los parásitos ya adquiridos puedan fabricar nuevos huevos y larvas contaminantes del ambiente.

Para estar bien seguros, siempre se debe tender a realizar una desparasitación preventiva (o sea, no sólo hay que desparasitar a la mascota cuando cojan los parásitos, sino que hay que evitar que los cojan). Ya no es sólo una cuestión de bienestar y salud del animal, sino que también es una cuestión de salud pública.

Recurre siempre a tu veterinario

Un buen protocolo de desparasitación preventiva debe tener en cuenta el ciclo de vida del parásito que se quiere prevenir. Es decir, la pauta y los intervalos de tiempo en los que se debe administrar el fármaco antiparasitario, debe diseñarse en función del tipo de parásito que se pretende prevenir. Como nuestras mascotas pueden estar infestadas por múltiples especies de parásitos, cuando se vaya a utilizar un antiparasitario que es efectivo frente a varios tipos de parásitos diferentes, la frecuencia de administración del fármaco se debe siempre hacer en relación con los parásitos cuyo ciclo de vida es más corto.

Por tanto, es el veterinario clínico el que debe recomendar la utilización de uno u otro producto y el seguimiento una pauta concreta, ya que sólo él conoce los ciclos de vida de los parásitos que más habitualmente afectan a nuestras mascotas, las vías de transmisión y las épocas del año en las que existe un mayor riesgo de infestación (ya que muchos parásitos son estacionales, aunque hay otros muchos que no lo son).

Clases de antiparasitarios

En cuanto al tipo de producto antiparasitario que debe administrarse a un animal que queremos que no se infeste con parásitos, este debe reunir una serie de características ideales. Cuanto más amplio sea el espectro mejor, es decir, cuanto mayor número de especies de parásitos cubra, mejor (de lo contrario, habrá que administrar muchos productos diferentes para poder tener a la mascota y a la familia protegida).

El fármaco tiene que tener una gran eficacia frente a ese parásito. Cuanto más cercano a 100%, mejor (el 100% es lo máximo, significa que elimina a todos y cada uno de los parásitos que podría tener el animal). Dentro de los antihelmínticos (antiparasitarios para los gusanos intestinales) los fármacos más efectivos serán los que comiencen a actuar desde los primeros tramos del intestino, de forma que no se dejen atrás ninguno.

Pero por otro lado, debe ser una sustancia que no sea nociva para nuestro animal. En el mercado existen muchos productos comercializados para la desparasitación interna y externa de las mascotas, y muy eficaces; pero muchos de ellos, también, pueden provocar efectos secundarios más o menos graves en nuestros animales, incluso en las personas que les administran el producto. Por ejemplo, provocar vómitos o diarreas por irritación del intestino, toxicidad sobre el hígado y/o el riñón (o incluso sobre el sistema nervioso), malformaciones en los fetos (cuando se administran a las hembras embarazadas) e incluso abortos o incapacidad para procrear.



Dentro de los antihelmínticos, el fármaco será mucho más seguro para la mascota cuando menos se absorba, ya que si se evita el paso a sangre, se asegurará que todo el fármaco se elimina directamente sin dañar al animal. Un último aspecto a contemplar, (que, si bien es secundario, no debe desdeñarse a la hora de considerar la idoneidad de un fármaco antiparasitario), es la facilidad de su administración. Un fármaco en comprimidos debe ser fácil de administrar, y debe cumplir estos requisitos: tamaño no demasiado grande pero tampoco demasiado pequeño, que no tenga mal sabor, y que tenga forma alargada y se deslice fácilmente en la garganta.

Dosificación

En cuanto a la pauta de administración, la mayoría de las 'Guías de buenas prácticas' recomiendan encarecidamente la desparasitación mensual de las mascotas, sobre todo si en el hogar existe algún familiar dentro de los considerados grupos de riesgo (ya mencionados anteriormente). Esto se debe a que la mayoría de parásitos tiene un ciclo de vida cercano a un mes y que los productos parasitarios son capaces de dar cobertura durante un mes de forma continuada.

En cualquier caso, si el veterinario valorara que la situación respecto a este animal fuera de bajo riesgo, se podría plantear una pauta de desparasitación cada tres meses, es decir, cuatro veces al año, una por estación. Se ha demostrado que hacer una desparasitación de menos veces al año (una o dos veces al año), no tiene ningún efecto sobre la presencia de parásitos en las heces y en el ambiente, por lo que esta práctica está totalmente desaconsejada.

Imágenes: Sxc.hu-
Autor: Redacción/facilisimo.com 

viernes, 5 de junio de 2015

Cortar las uñas a un perro

 El corte de las uñas del perro ha de ser parte de los hábitos cotidianos de higiene de nuestra mascota en casa
Autor: Por EVA SAN MARTÍN

Imagen: ripkas

El cuidado de las patas del perro debe formar parte de la rutina de higiene de nuestra mascota. Una longitud de uñas más larga de lo recomendable puede resultar molesta para el animal, ya que dificulta su movimiento. Cortar las uñas de nuestro amigo, no obstante, es una actividad delicada. Conviene tener en cuenta ciertos consejos para realizarla de forma apropiada y sin riesgo para el can.

El cuidado de las uñas: un hábito de higiene

En casa, conviene realizar la limpieza del perro como una parte más de la rutina de aseo del resto de la familia. La higiene completa de un perro implica hábitos rutinarios: el baño, el cepillado y la limpieza de los dientes o de los oídos son partes fundamentales del aseo de un perro y contribuyen a asegurar su salud y la de las personas con quienes convive.

El cuidado de las patas del perro debe formar parte de su rutina de higiene

También el cuidado de las patas y el corte de las uñas de nuestra mascota deben formar parte de este aseo rutinario. Para ello, se debe saber que hay al menos dos clases de cortauñas caninos: las tijeras y los de tipo guillotina.

Acostumbrar al perro desde cachorro: la clave del éxito

Cuanto antes comience a cortar las uñas de su perro, antes aceptará el animal esta práctica como parte de sus hábitos cotidianos. Recuerde que el can es un animal de costumbres. La rutina habitual del cuidado de sus patas y pezuñas puede convertirse, asimismo, en una forma de estrechar la relación con su animal de forma positiva: acompañar el corte de las uñas de su mascota con caricias y palabras amables contribuirá a que se sienta más cómodo.

Recuerde que el cortador de uñas es un objeto extraño para su mascota: si utiliza esta herramienta desde que es un cachorro, será más sencillo que el animal acepte el cortador como un utensilio familiar.

Cuándo hay que cortar las uñas de su mascota

Una de las preguntas frecuentes que pueden surgir al planificar el cuidado de las patas de su mascota es saber cuándo es el momento apropiado de recortar sus uñas. Una de las señales que avisan de que ha llegado la hora de utilizar la tijera es escuchar el impacto de las uñas del perro mientras camina. En cualquier caso, su veterinario le ayudará a cuidar de esta necesaria rutina de higiene.

Como regla general, conviene recordar que las pezuñas de nuestro perro precisan, de media, un recorte una vez al mes. Dejar crecer las uñas de su mascota por encima de la longitud recomendable le acarreará ciertos malestares: su perro puede encontrar dificultad al apoyar las almohadillas de sus patas para caminar. Andar se convertirá en una experiencia dolorosa para una mascota que no cuenta con el apropiado cuidado de esta parte de su cuerpo.
Cortar las uñas poco a poco

Recortar pequeños pedazos de uña de nuestro perro es más recomendable que optar por sesgar largas longitudes de esta extremidad.

Las pezuñas de nuestro perro precisan, de media, un recorte una vez al mes

El nervio de la uña del can suele ser menos visible que en otras mascotas, como el gato. Por ello conviene estar seguros de que, en ningún caso, nos sobrepasamos al realizar el corte. Su veterinario le ayudará a conocer con exactitud, en cada caso, cuál es la medida de la uña de su amigo que no puede sobrepasar.

Ofrecer a su mascota caricias, palabras amables, e incluso, algún premio comestible o juegos después de terminar su higiene, ayudará sin duda a que se muestre más receptiva cuando llegue el próximo corte de uñas.

Consejos

 Recuerde que el cuidado de las patas del perro debe formar parte de la rutina de higiene de nuestra mascota.

Existen al menos dos clases de cortauñas caninos en el mercado: las tijeras y los de tipo guillotina. Su veterinario le aconsejará cuál es el más apropiado en cada caso.

Cuanto antes comience a cortar las uñas de su perro, antes aceptará el animal esta práctica como parte de sus hábitos cotidianos. Recuerde que el can es un animal de costumbres.

Las pezuñas de nuestro perro precisan, de media, un recorte una vez al mes.

Tenga en cuenta que dejar crecer las uñas de su mascota por encima de la longitud recomendable, puede acarrearle ciertos malestares: andar se convertirá en una experiencia incómoda.

Recortar pequeños pedazos de uña de nuestro perro es más recomendable que optar por sesgar largas longitudes de esta extremidad.

Tenga en cuenta que el nervio de la uña del can suele ser menos visible que en otras mascotas, como el gato. Su veterinario le ayudará a conocer con exactitud, en cada caso, cuál es la medida de la uña de su amigo que no ha de sobrepasar.

miércoles, 3 de junio de 2015

Ideas originales y trucos low cost para tu mascota

Tener mascotas no deja de ser una preocupación añadida a nuestras vidas. Pero con un poco de ingenio y habilidad, podemos dar salida a esos pequeños problemillas que implican tener un animal entre nosotros, sobre todo económicamente hablando.

Existen mil trucos para no dejarte un pastón en accesorios para mascotas y otras mil ideas que te harán la vida más fácil: camas para gatos hechas con toallas, cajas de arena ocultas y decorativas, circuitos para roedores a base de botellas, antipulgas caseros… Hagamos un repaso de alguno de ellos.



Arte canino


Una original y estilosa alternativa a decorar tu hogar con las fotos de tus mascotas es crear composiciones con las huellas.



Una cama low cost

Con unas toallas apiladas y cosidas entre sí podrás crear una cama para mascotas más barata que la que puedas encontrar en el mercado y muy fácil de lavar. Además, es una buena idea para reciclar toallas, pues puedes utilizar toallas viejas y feas entre las capas que no se ven.



Un circuito para pequeños roedores

Si no te gusta ver a tu pequeño hamster encerrado en la jaula todo el día y quieres darle un poco más de espacio, prueba a hacerle un circuito con botellas de plástico para que campe a sus anchas. haz un agujero en el culo da cada botella y engancha el morro de otra. Hazlo tan largo como tu imaginación y tu espacio te lo permitan.



Ropa de niños para perros

Si a tu hijo se le ha quedado pequeña la ropa de invierno, puedes aprovecharla para abrigar a tu perro -adaptándola ligeramente en caso de ser necesario- en lugar de comprarle ropa especial. Eso sí, asegúrate de que tu mascota se puede mover con facilidad, que cada perro y cada prenda son un mundo. Si el perro es más grandote, podría incluso hasta aprovechar ropa de adulto.



Recicla tus cinturones


Si tienes un cinturón viejo o tan usado que se ha roto por la zona donde lo ajustas, no lo tires, puedes aprovecharlo como collar para tu perro; siempre y cuando no sea demasiado ancho. Solo tendrás que cortarlo a la largura necesaria y hacerle agujeros.



Refrescante bocado

El calor afecta por igual a personas y animales. Si nosotros tomamos granizados y helados para combatir el calor, ¿por qué tus mascotas no? Prepárales caldo de pollo, pescado, etc. y congélalo en cubitos para que se refresquen cuando hace calor.



Limones contra las pulgas

A las pulgas no les gusta el ácido cítrico, así que puedes mantenerlas a raya frotando el pelaje de tu perro o gato con pequeñas cantidades de limón, naranja o alguna fruta similar.



Librería gatuna


Que a los gatos les gustan las alturas y trepar no es nada nuevo. Probablemente te lo habrás encontrado recostado entre tus libros en lo alto de la librería y, en el peor de los casos, tirando los libros al suelo. Esta peculiar librería está diseñada para que libros y gatos compartan espacio sin molestarse los unos a los otros.



Todo en orden


Tener mascotas a veces conlleva tener trastos desparramados por toda la casa sin saber dónde guardarlos. Esta práctica idea propone reconvertir una cómoda en comedero para tus perros o gatos, para tenerlo todo a mano, pero limpio y ordenado.





Una caja de arena oculta

Lo mismo sucede con las cajas de arena de los gatos, no son lo más agradable del mundo a la vista. La solución: integrarlos en otros muebles para que queden ocultos, o cubrirlos en cajas decoradas al gusto.



Caja de arena low cost

Pero si lo que quieres es gastarte lo mínimo y no eres muy manitas, una caja de almacenaje con un agujero en la tapa hará la misma función: ocultar las “cosillas” de tu gato y mantener la arena dentro.





Una mansión para tu roedor

Haciendo unos agujeros estratégicos a una librería y cubriéndola con malla metálica, tendrás lista una lujosa y espaciosa residencia para tu hámster o conejo.