sábado, 12 de marzo de 2016

Expertos buscan alternativas para "cono de la vergüenza" en mascotas

Empresas han comenzado ha confeccionar distintos estilos de cono, incluidos inflables y suaves, además de cómodos trajes de una pieza para reemplazar a los clásicos conos plásticos.




Los conos de plástico colocados al cuello de los perros para evitar que se muerdan o rasquen sus heridas o suturas parecen molestar a las mascotas, por lo cual algunos expertos están diseñando alternativas.

"No estaba feliz. No podí­a comer con él, no podí­a jugar con él, no podí­a moverse en él", dijo Brooke Yoder de Millesburg, Ohio, de su perra Marley, una maltés-shih tzu que traí­a un collar para proteger sus suturas después de ser esterilizada.

Los primeros conos fueron hechos a mano por el vendedor farmacéutico Edward J. Schilling a principios de la década de los 1960, y siguen siendo el protector de heridas o suturas más vendido, dijo Ken Bowman, presidente del fabricante de conos KVP International, con sede en Chino, California.

Sin embargo, su compañí­a y otros intentan hacer algo mejor. KVP hace 14 estilos de cono, incluidos dos inflables y dos suaves. Tiene tamaños tan chiquitos como para ratones y tan grandes como para mastines. La compañí­a investiga si el cono actúa como amplificador, probablemente lastimando los oí­dos del animal, o si la pérdida de visión causa estrés.

Una alternativa viene de Stephanie Syberg de St. Peters, Missouri, fundadora y presidenta de Cover Me by Tui, que hace prendas postquirúrgicas para perros. "Estuve en la medicina veterinaria 16 años. Con frecuencia me preguntaban, '¿Qué podemos usar en lugar del cono de plástico?''', dijo Syberg.

Su prenda de una pieza fue probada en 200 perros. "Los veterinarios ven un efecto calmante", dijo. "La tela respira, así­ que ayuda a la curación".

Gayle Swetow de Henderson, Nevada, se ha convertido en cliente regular de Syberg. Le pidieron ponerle un cono a su perro de dos años para proteger una incisión de 15 centí­metros (6 pulgadas) luego de ser operado de la cadera.

Los conos son "terribles. Los perros no ven hacia dónde van. No pueden brincar. Comer, moverse o caminar es casi imposible con un cono, pero pueden hacer todo si tienen un mameluco".

La poca popularidad del cono también ha dado pie a alternativas muy creativas de diseñadores y artistas en el sitio web More Than a Cone (www.morethanacone.com).

Fuente: latercera

No hay comentarios:

Publicar un comentario