Alicante - La Verdad
El Ayuntamiento ofrece comida y veterinario gratis a animales de familias con pocos recursos
LA CIFRA
550 euros al año es el coste mínimo que supone el mantenimiento de una mascota. De ellos, 150 euros son para cubrir costes médicos básicos exigidos por ley, como desparasitación y vacunas, y 400 para comida y otros gastos.
Los animales de compañía también se ven afectados por la disminución de ingresos que tienen que afrontar muchas familias de Alicante. Un perro supone asumir responsabilidades personales y también sus necesidades directas. Las dificultades económicas, cambios de domicilio por trabajo y otras situaciones sobrevenidas, suponen un problema añadido para muchas familias.
Cuando la cosa se pone fea, muchas que se ven abocadas a dejar a las mascotas en centros de acogida por no poder mantener a los animales en el entorno familiar.
Ante esta situación y para evitar que el número de abandonos se dispare, el Ayuntamiento de Alicante, a través de la Concejalía de Sanidad y de la Sociedad Protectora de Animales y Plantas que gestiona el Albergue Municipal de Animales, han puesto en marcha un programa para ayudar a estas familias y, con ellas, a sus mascotas.
Se trata de una especie de banco de alimentos para los animales, acompañado por un servicio de veterinario. Cuando un propietario no puede asumir el coste de tratamiento veterinario de un animal doméstico, pueden acudir al albergue para que su animal sea atendido de sus necesidades básicas. Basta con acreditar mediante informe de los Servicios Sociales municipales la situación de desamparo del titular o su dificultad económica. El animal será atendido gratuitamente tanto de la enfermedad que manifieste y también se le mantendrá al día de las medidas preventivas imprescindibles para su convivencia en familia, es decir vacunación y desparasitación.
También se ha iniciado un programa de ayuda para cubrir la alimentación de estos animales en familias con dificultades, con campañas de captación de piensos y productos de desparasitación, con apadrinamientos y otros donativos orientados a mantener las mascotas con sus familias, para facilitar la manutención en el propio hogar y evitar el abandono.
Según cálculos de la Concejalía de Sanidad, que dirige el edil Luis Barcala, cada hogar con una mascota debe desembolsar alrededor de 150 euros anuales en costes médicos para cumplir con la normativa, que incluye vacunas, prevención de parásitos y cuidados básicos, sin contar las atenciones que puedan surgir por accidentes, alergias, fracturas y otras ocasiones excepcionales.
A ello hay que sumar casi 400 euros en otros gastos, principalmente comida, que varían en función del tamaño del animal.
La Sociedad Protectora de Animales y Plantas de Alicante ha observado en los últimos años que se han incrementado los casos de desatención a los animales domésticos por la crisis. Especialmente significativa respecto a las medidas preventivas.
Se han encontrado con muchos animales sin vacunar de la parvovirosis y leishmaniosis, e incluso sin la vacuna antirábica, cuando es un tratamiento básico y obligatorio en la Comunitat Valenciana.
«La mayoría de los animales que llegan al albergue están enfermos por esta falta de prevención», explican desde la protectora. «Y los casos se dan no solo en familias con situación social marginal sino en otras con ingresos demasiado ajustados y que recortan de lo que consideran que no es imprescindible», añaden.
La Concejalía de Sanidad y la protectora tienen miedo de que esta situación se agrave y que pueda derivar en la propagación de enfermedades peligrosas por contagio entre animales no vacunados.
Por eso han decidido poner en marcha los programas de manutención y veterinario gratuitos para familias con dificultades económicas.
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